La entrada en vigencia del nuevo ajuste del salario mínimo, despertó
precoupación en las autoridades de la Cámara de Comercio de Nueva
Esparta, ya que inexorablemente muchos comerciantes se verán obligados a
reducir las nóminas.
Teodoro Bellorín, presidente de ese gremio empresarial expresó que
aun cuando no pueden estimar la reducción en términos porcentuales por
no contar con un centro de estadisticas, estiman que será elevado
tomando en cuenta que ya muchos han venido reduciendo espacios para no
recortar las nóminas.
Lamentó que ese incremento salarial obligue a dejar en la calle a
decenas de trabajadores en el sector del comercio local, pero insistió
que más preocupante resulta el impacto que eso va a tener en la
inflación.
Bellorín admitió que aunque el incremento es irrisorio y que
vaticina, será consumido por la inflación, el deterioro de la economía
local por falta de divisas obligará a gran parte de los afiliados a
despedir personal.
Tampoco descartó que muchos de esos comerciantes que han reducido sus
locales, tengan que cerrar definitivamente sus establecimientos.
Recordó que el año pasado más de 170 comerciantes tuvieron que cerrar
sus comercios, por no contar con las divisas necesarias para las
importaciones que permitan renovar los inventarios.
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