El Nissan GT-R es uno de esos vehículos que se ha convertido en sinónimo de lo que representa, una distinción que alcanzan muy pocos automóviles. Lo es de la conducción deportiva y también de la cultura japonesa, plaza que lo vio nacer y evolucionar hasta llegar al Nissan GT-R 2017 que fue presentado en la más reciente edición del Auto Show de Nueva York.
Los orígenes del GT-R se remontan a 1966, con la fusión entre Nissan y Prince Motor Company, un pequeño fabricante de automóviles nacido de las cenizas de una operación aeronautica prohibida después de la Segunda Guerra Mundial, que desde 1955 construía con relativo éxito un sedán de lujo llamado el Skyline, el cual había logrado fama y respeto en las pistas de carreras. Tres años más tarde, fue una versión del Skyline el primer vehículo en lucir el emblema GT-R, el Nissan Skyline 2000 GT-R 1969, una versión de alto poder equipada un motor de 2.0 litros capaz de entregar 160 caballos de fuerza, que fue presentada en el Auto Show de Tokio de 1969. El Nissan Skyline 2000 GT-R fue seguido por una versión coupé en 1970. La nueva versión del Skyline siguió la tradición automovilística de sus predecesores acumulando 83 victorias en competencias al concluir su término en 1972.
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El Skyline 2000 GT-R de 1969, pionero en la línea histórica del gran deportivo japonés.
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En contexto desfavorable, el de 1973 vendió menos de 200 unidades; no obstante, en él ya hay señas clásicas de la gama.
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Renacimiento y aparición de la insignia
Los viejos GT-R continuaron siendo populares en las pistas, lo que mantuvo al nombre vigente y llevó a Nissan a confiar en su viabilidad comercial. El lanzamiento de la séptima generación del Nissan Skyline en agosto de 1985 como modelo 1986 fue seguida rápidamente por la llegada del Skyline 2000 GTS-R, una versión limitada que contaba con un motor de 6 cilindros en línea turboalimentado capaz de desarrollar 210 caballos de fuerza presagiando el eventual regreso del GT-R, lo que ocurriría tres años más tarde.
En el año 1989 finalmente regresa el Nissan Skyline GT-R, basado en la octava generación (R32) del Nissan Skyline. El nuevo GT-R incluyó un innovador sistema de tracción integral ideado para la competición, el cual se convirtió en un signo distintivo del modelo. La versión de calle contaba con un motor de 6 cilindros en línea con 2.6 litros de desplazamiento que entregaba 276 HP y era capaz de ir de 0 a 62 mph en 5.6 segundos. Las 5,000 unidades previstas en primera instancia se agotaron rápidamente, por lo cual el fabricante japonés decidió iberar la producción vendiendo un total de 43,934 unidades. El nuevo GT-R sigió apuntalando el prestigio del Skyline en las pistas consiguiendo entre otros galanrdones, la corona del Campeonato de Turismo de Japón, por 5 años consecutivos.
Una edición limtada del GT-R incluyó una serie de modificaciones, como un alerón trasero y entradas de aire más grandes respecto a la edición estándar. Más tarde, Nissan decide homenajear al laureado GT-R R32 con el Skyline GT-R V.spec, para el cual sumó frenos Brembo y llantas de 17 pulgadas, entre otros avances. Antes de que llegue el sucesor, el R33, el fabricante lanza el GT-R V.spec II, que se vendió en Japón con carrocería en color blanco y neumáticos más anchos respecto a la anterior edición.
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El modelo R32 revive el nombre GT-R tras 16 años de ausencias.
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La necesidad de evolucionar
Pisando sobre el terreno firme que había logrado el GT-R R32, Nissan decide continuar con la evolución del modelo. Así en enero de 1995 llega el Nissan Skyline GT-R. basado en la novena generación (R33) del NIssan Skyline presentada en 1993. El fabricante decide conservar el motor de 6 cilindros biturbo de 2.6 litros, para el cual logra un incremento en las revoluciones sin pérdida de potencia. También conservó la transmisión de 5 marchas, y mejoró el sistema de tracción total, denominado ATTES E-TS. Con un ligero incremento en el peso, R33 también supuso una serie de cambios a nivel visual, más cercano al suelo y con una aerodinámica superior a la de su antecesor. Este vehículo debuta en el mercado en 1995, junto con la versión GT-R R33 V.spec. Luego aparece el R33 V.spec N1 y el GT-R LM de competencia, este último con un motor que entregaba brutales 600 caballos de fuerza. Corrió en Las 24 Horas de Le Mans, aunque también tuvo su edición de calle, menos potente, el R33 LM. Nissan GT-R R33 400R dice llega en 1997 con un motor biturbo capaz de ofrecer 400 HP y alcanzar las 62 mph en sólo 4 segundos.
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El GT-R R33 fue mostrado en 1993 y tardó 2 años en debutar en el mercado.
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Con el desafío de superar las prestaciones de los modelos anteriores de la gama, en 199 aparece el R34.
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Otra de las mejoras presentes en el R-34 aparecía en su interiorcon l primera plicación de una pantalla LCD de 5.8 pulgadas con funcionalidades que hoy son un estándar y que por entonces resultaban una verdadera innovación como por ejemplo el despliegue de información relativas al funcionamiento y estado del motor. La producción del R34 finalizó en 2002, con más de 12,000 unidades fabricadas.
Tiempos de espera
En 2007, 5 años depués de su desaparición, llegó finalmente el sucesor del GT-R (R34) haciendo su debut en el Auto Show de Tokio de ese año. Disociado de la estética del Skyline, el cual finalmente había llegado a las costas de los Estados Unidos como el Infiniti G, el nuevo GT-R si compartía su arquitectura básica. El nuevo GT-R lucía como nunca antes el rol que está destinado a jugar tomando importantes claves de diseño de los conceptos que en 2011 y 2005 Nissan había mostrado. El nuevo GT-R contó con un motor V6 de 3.8 litros que entregaba 478 caballos de fuerza, con tracción integral y transmisión automática de 6 marchas.
El R35 exhibía algunas marcas interesantes, como una velocidad máxima de 194 mph y la capacidad de ir de 0 a 62 mph en 3,3 segundos. Además, Nissan mejoraba el sistema ATTES E-TS, incluyendo un sistema que permite a cada eje controlar el agarre del neumático en forma independiente. La nueva pantalla multifunción del vehículofue diseñada por los creadores de la saga de videojuegos "Gran Turismo".
En 2009 apareció una edición del R35 con mecánica mejorada, la cual incluyó un motor capaz de ofrecer 549 HP, potencia muy poco común para vehículos de calle. El R35 también pasó por las manos de Nismo, la división de competición de Nissan, que le agregó un alerón trasero, neumáticos especiales y llantas de 20 pulgadas, y por supuesto un incremento en la potencia que alcanzó los 600 HP.
El GT-R R35 se convirtió en el tercer modelo de producción más rápido en completar una vuelta a Nürburgring, con 7 minutos y 8,679 segundos.
New York, New York...
Para presentar la más reciente actualización de su ya legendario GT-R, Nissan escogió el Auto Show de Nueva York 2016. El Nissan GT-R 2017 llegó con cambios en el apartado estético, así como mejoras mecánicas. El mismo incluye un motor de 3.8 litros biturbo con 573 HP y una transmisión automática de 6 marchas.
En el exterior resalta la adopción de la parrilla V-Motion de Nissan, inclusión que obligó al fabricante a rediseñar el capó que es ahora aún más esculpido. Los faldones laterales son ahora protuberantes para mayor eficiencia aerodinámica, mientras que el parachoques trasero incorpora salidas de aire funcionales.
"El GT-R jamás contará con ventas masivas de otros modelos de la marca como el Altima o ni siquiera con las ventas del 370 Z, pero si es un confiable imán de público para los salones de venta de la marca y sobre todo un gran generador de buena reputación para Nissan", dijimos. No es casual que "Godzilla" sea uno de sus apodos, una figura definida por su vínculo con Japón y también con la potencia.
"Nuestro objetivo era crear un buque insignia para promocionar nuestra tecnología... aunque también desarrollar un nuevo tipo de supercoche. Tradicionalmente, los supercoches se fabricaban pensando en conductores con habilidades avanzadas. Sin embargo, casi todo el mundo puede conducir nuestro nuevo superdeportivo versátil de forma veloz y hábil, sean cuales sean las condiciones de la carretera". Estas palabras, dichas por Mizuno-san, el creador del Nissan GT-R, resumen la esencia de este clásico de la deportividad.
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