“El Triángulo de la vida” demuestra que estar debajo de un escritorio durante un sismo no es seguro

Cuando los movimientos telúricos ocurren sorprenden hasta a los más expertos en materia de supervivencia, rescate o protección. Gustavo Pírela, Sargento Mayor y jefe de la División de Rescate de los Bomberos de Maracaibo, nos enseña “El Triángulo de la vida” y cómo actuar, durante y después de un sismo.

El experto en rescate explicó que la calma es la mejor herramienta en una situación de riesgo, de cualquier índole, pero en el caso de un terremoto, lo recomendable es estar preparado y saber proceder. “Los sismos no se pueden predecir, pero nos podemos preparar para recibirlos y a conocer nuestro entorno para protegernos”.

La mayoría de las personas corre a refugiarse debajo del marco de una puerta, o se esconde bajo un escritorio o una cama. “Cuando tienen es que ponerse al lado de un escritorio fuerte o un objeto físico resistente en posición fetal”. Pírela señala que la idea del marco de las puertas es inviable, ya que el cuadro de la puerta puede ceder ante un derrumbe “y más si la edificación es vieja, por eso recomendamos la técnica del Triángulo de la vida”.


El Triángulo de la vida, un concepto originado por Douglas Copp, fundador y jefe del “Equipo Internacional Americano de Rescate”, ARTI, por sus siglas en inglés. Una compañía privada de rescate.

Para Pírela una cama, una mesa fuerte o escritorio serían los primeros objetos a utilizar a su favor para cubrirse de alguna columna o viga que pueda desprenderse de una edificación durante un terremoto, explicó que el ángulo que se genera entre el objeto fijo y el suelo, “es vacío si llegase a caer una pared y allí nos podríamos refugiar hasta que llegue la ayuda”.

El Sargento Mayor explicó que los Bomberos de Maracaibo dictan prácticas en organizaciones, colegios u oficinas de trabajo donde realizan simulacros “para así crear cultura y tener a preparados a los ciudadanos ante una situación de riesgo”.

El experto en rescate recalcó que en las viviendas o en el área de trabajo es recomendable tener un botiquín de primeros auxilios con vendas, linterna, pilas, comida no perecedera, agua y algún radio transmisor con el que pueda una persona informarse ante una catástrofe y al finalizar un sismo recurrir a la técnica de revisión. “Salimos a la comunidad o a la calle y observar cuales son los edificios que sufrieron derrumbes o cuales vecinos están corriendo riesgo y así ayudan a los bomberos a determinar, con rapidez, cual es la víctima que con urgencia amerita ser atendido”.



José Antonio González
Fotos: William Ceballos
Noticia al Día


Compartir en Google Plus

Sobre Unknown

0 comentarios:

Publicar un comentario