El gobierno madurista -que pregona el cuidado de los necesitados-
permitió que los pensionados y jubilados, luego de largas, colas
recibieran billetes de 100, 5 y hasta de 2 bolívares.
Los ancianos tuvieron que apostarse en los bancos desde temprano y no
recibieron más de 10.000 bolívares, y en billetes que pronto saldrán de
uso (los de 100). A pesar de demostrar su incorformidad tuvieron que
aceptar lo que les dieron.
Reinaldo Hernández, de 70 años de edad, dijo que le dieron billetes
que teme que no le acepten en los comercios y necesita comprar
alimentos: “A mí me pagaron la pensión con el billete muerto y
resucitado a los seis días, tuve que aceptarlo, pero no saqué la pensión
completa”.
Los abuelitos la pasaron mal en los bancos, y muchos tuvieron que
salir con pacas de billetes de 2 bolívares, que tampoco están aceptando
en los lugares donde se pueden comprar la comida o las medicinas.
Con información de El Nacional
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