El líder opositor, Leopoldo López,
está grave tras 28 días de huelga de hambre en la prisión militar de
Ramo Verde. Su mujer, Lilian Tintori, denunció ayer que sus carceleros
no permiten que lo examine su médico de confianza, el gastroenterólogo
Guillermo Seijas, publica abc.es.
L. VINOGRADOFF / / CARACAS
El fundador del partido Voluntad Popular, encarcelado hace 16 meses y
acusado de «rebelión», ya empieza a sufrir las consecuencia del ayuno.
Ha perdido unos 15 kilos y está en los huesos, «sus músculos comienzan a
degenerarse; el corazón, los riñones y el hígado se ven afectados»,
explicó Tintori, quien señaló que está en su derecho de pedir un médico
de confianza.
Su abogado, Roberto Marrero, describió a ABC que López «camina lento y
con dificultad, arrastrando los pies y apoyándose en las paredes».
«Muchas veces las secuelas en la salud son irreversibles», añade su
médico.
En Caracas ayer se celebró una nueva protesta de solidaridad con los presos políticos
y sus demandas, en la que también participó Tintori. El secretario
ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Chúo Torrealba,
recorrió unos tres kilómetros con más de cien estudiantes y activistas
sumados a la huelga de hambre.
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