El ministro de Interior y Justicia, Tareck El Aissami, denunció, lo
que a su consideración está detrás de las declaraciones del ex
magistrado Aponte Aponte, “el Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DEA), contribuyó a la fuga de Aponte Aponte, cuando investigábamos sus vínculos con otros hechos mucho más graves, que iban a ser expuestos en un juicio en Venezuela”.
El ministro detalló que el ex magistrado fue destituido sobre la base
de elementos probatorios por sus, presuntos, vínculos con las redes del
narcotráfico, “el mismo confesó que conocía y mantenía relación con Walid Makled y que le facilitó las condiciones necesarias para operar”, por eso era investigado por la justicia venezolana.
Algunos de los delitos que pesan sobre Aponte son el cobro de comisiones, pago de sentencias, para favorecer a personas involucradas por con la venta y distribución de sustancias estupefacientes, según El Aissami.
“Ahora en Venezuela no hay intocables, ni privilegiados, ni protegidos”
Por otra parte, Tareck El Aissami destacó y reivindicó la actuación
de las instituciones del estado y la autoridad democrática en Venezuela,
“antes existían redes intocables, con esta actuación de destitución de
un alto magistrado, se demuestra que aquí no hay intocables, ni
privilegiados, ni protegidos” resaltó.
“DEA y Estados Unidos “protegen y albergan a traidores y prófugos”
El ministro de Interior y Justicia señaló el caso de Aponte Aponte,
como otro ejemplo donde la DEA y Estados Unidos “protegen y albergan a
terroristas, narcotraficantes, traidores, prófugos”, (…) “allá
encuentran el sitio ideal para delinquir y vivir impunemente“, fustigó.
“El tiempo nos ha dado la razón, la DEA es un cartel del
narcotráfico, que los protege, es cómplice y facilita esas actividades”,
asimismo, manifestó que toda la operación de fuga del ex magistrado fue
organizado por esta organización, “se desenmascara ese supuesto
departamento imparcial y se demuestra su participación para la
conspiración y desestabilización de los países soberanos”, agregó.
“Cuando operaba la DEA en nuestro país no se capturó ni un sólo
involucrado”, ligado a la distribución de estupefacientes, “pero después
que el presidente Hugo Chávez, de manera soberana y firme decidió
romper los acuerdos de cooperación en este ámbito”, se ha duplicado la incautación de droga, golpeado a las mafias importantes y desmantelado la organización logística para fines delictivos, explicó El Aissaimi.
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