Al menos 12 personas han sido asesinadas en lo que va de año al salir de entidades financieras. Policías y Cicpc realizan trabajos de inteligencia para determinar si hay complicidad con empleados bancarios.
Jesús Armando Rivas, de 70 años de edad, fue asesinado el 7 de junio por resistirse al robo en la urbanización Las Fuentes, en El Paraíso. Era comisario jubilado de la antigua Policía Técnica Judicial y acababa de retirar 5.000 bolívares en efectivo de una agencia bancaria de la zona. Al salir, fue ultimado a tiros por unos motorizados que lo interceptaron para despojarlo del dinero.
A cuatro meses de la muerte de su padre, Javier Rivas exige que se haga justicia: “Desde que mi papá murió la División contra Homicidios del Cicpc ha llevado las investigaciones del caso y estoy seguro de que van a dar con los responsables. Quiero que se haga justicia aunque mi padre esté muerto. Lo importante es evitar que otras personas sean víctimas de casos como este”.
En lo que va de año, 12 personas han perdido la vida al ser atacadas por motobanquistas o bandas dedicadas a asaltar a quienes retiran grandes sumas de dinero de agencias financieras. Funcionarios policiales e investigadores atribuyen estos hechos a la posible existencia de informantes dentro de las instituciones bancarias, bien sea empleados que actúan como cómplices o delincuentes que se hacen pasar por clientes para observar y escoger a su víctima.
El criminólogo Fermín Mármol García dijo que los venezolanos tienen que cambiar su modo de realizar ciertas las actividades, debido al incremento de índices delictivos.
“Son pocas las agencias bancarias en donde cualquier persona se puede dar el lujo de retirar grandes sumas de dinero”
“Quienes tienen la intención, por ejemplo 3.000 bolívares, deben tomar en cuenta que eso puede ser apetecible para cualquier delincuente”, destacó.
Agregó que normalmente los hampones que se dedican a robar a las usuarios que salen de las agencias bancarias son los llamados “coco seco” que, en la mayoría de los casos, son jóvenes: “Este tipo de ladrones es muy peligroso porque comúnmente en esas edades consumen mucha droga, lo que los hace muy violentos. Cuando el “coco seco” da la voz de alto y no es correspondido por su víctima, lo puede considerar un irrespeto. Cualquier movimiento que le haga presumir que puede ser amenazado, en este país se paga con la muerte”.
El especialista advirtió que los “coco secos” han logrado establecer una mini organización: “En los días cuando hay más afluencia de gente en los bancos, dos o tres personas entran como si fueran clientes; estos son los llamados “campaneros”, que son los encargados de informar a los “pegadores”, que normalmente son motorizados, cuáles son las personas que saldrán con grandes sumas de dinero para que los roben”, explicó.
El director de Polibaruta, Fredy Rico, añadió que en ese municipio han descubierto la presencia de una organización que opera en complicidad con empleados de una entidad financiera de la jurisdicción: “Nuestro cuerpo policial y el Cicpc adelantan investigaciones para desmantelar un grupo delictivo que este año ha estado involucrado en ocho casos de “paquete chileno”.
Sabemos que una mujer junto a dos hombres intentan engañar a los usuarios que entran al banco. Lo recomendable es que las personas no saquen grandes sumas de dinero.
“Estamos seguros de que parte del personal de las entidades bancarias informa quiénes salen con suficiente efectivo”
Libertador es el municipio con más casos de robos con homicidios en las adyacencias de agencias. Fermín Mármol García declaró que en esa jurisdicción las personas que retiran efectivo son más vulnerables a este tipo de delito. En lo que va de año, al menos cuatro personas han sido asesinadas por resistirse a ser despojadas del dinero.
Se intentó conversar con autoridades de Policaracas, organismo encargado de resguardar las zonas de la alcaldía, pero no fue posible.
En municipios como Baruta, Chacao y El Hatillo no se han reportado denuncias por robo con homicidios de personas que acabaran de retirar dinero de bancos.
Sin embargo, se han presentado varios casos de “paquete chileno“, que es una modalidad en la que tres o cuatro personas le hacen creer a su víctima que a uno de ellos se le cayó un dinero.
En la mayoría de los casos, otra persona se acerca a recoger “la plata” y posteriormente tratan de involucrar en el hecho a la persona a quien le quieren robar el efectivo que sacó del banco.
En relación con esta modalidad, en Baruta se han presentado 8 casos, en El Hatillo 4, en Sucre 1 y en Chacao 28.
Por Angélica Lugo El Nacional
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